martes, 10 de mayo de 2011

Love goes on anyway

Parece exagerado entristecerse, e incluso a veces soltar una lagrimita, por la muerte de alguien que no conoces. No has cruzado nunca una palabra con él, ni siquiera le has tenido a menos de tres metros, pero sí has reproducido sus discos hasta la saciedad: pinchando, en el coche, en casa, de viaje...y también has tenido la suerte de verle encima de un escenario. Has leído tanto sobre él o su grupo y, repito, has escuchado sus discos tanto que al final hasta te da la impresión de conocerle. ¿Ahora es cuando parezco una fan loca por Justin Bieber, no? Si tuviera quince años tal vez sí estaría hablando de él pero por ¿suerte? no los tengo y de quien estoy hablando es de Grant McLennan y sus ENORMES The Go-Betweens.

Se acaban de cumplir cinco años desde su muerte y aún duele la pérdida de uno de los compositores más grandes, junto a su inseparable compañero Robert Forster, y a los que yo personalmente les agradezco la maravillosa colección de canciones que han dejado para la posteridad. Como ponerlas todas o mi top personal es excesivo, me quedo con mi favorita. Una de esas canciones que soy capaz de ponerme un día entero en modo repeat y no cansarme nunca de ella. Es lo que tienen las canciones redondas y buenas de verdad.

3 comentarios:

  1. Comparto pasión -y tristeza- por The Go-Betweens y Grant McLennan, y hasta canción favorita del grupo, “Love goes on!”, una canción luminosa y perfecta como pocas.

    Aunque ambos compositores eran –son- geniales, yo siempre he sido un poco más de McLennan: sus canciones eran más directas, más románticas… más pop

    ResponderEliminar
  2. Se agradece no estar sola ;)

    Yo también siempre fui más de McLennan

    ResponderEliminar
  3. Una de mis canciones favoritas también. Recuerdo con cariño a la par que nostalgia cuando la pinchabas en el Déjate besar.

    Nunca he entendido como ésta y Quiet heart (de mi disco favorito de ellos: sixteen lover lanes)se quedaron fuera del recopilatorio. Tampoco por qué las excluyeron de su repertorio en las tres veces que les vi. El inicio de guitarras consigue dejarme noqueado. Por suerte, la melodía es infalible también. Supongo que por eso yo me uno al club de Grant. Era un mago de las melodías redondas y pocas veces he podido resistirme a ellas.

    ResponderEliminar